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Con los dedos completos Celso deja la carpintería

DZITBALCHÉ.— Celso Cauich Tun de 79 años se retiró de la carpintería ya que no le alcanzan las fuerzas para seguir ejerciendo este noble trabajo, que sirvió para sacar adelante a sus 6 hijos que procreó junto con su esposa María del Carmen Pech Puch, sin embargo está orgulloso ya que dos de sus vástagos adoptaron esta labor.

Cauich Tun dijo tener su domicilio en la calle 25 entre 13 y 24 del barrio de San Feliciano en la ciudad de Dzitbalché, donde por poco más de 30 años estuvo trabajando en su carpintería, al realizar diferentes tipos de artículos con las maderas de pich, zapote, jabín, ramón, y cedro, entre otras de la región.

“El inicio fue difícil, especialmente por las herramientas simples para cortar la madera, tornearla, y perforarla, para lo cual utilizaba un barrenador manual lo que originaba que los trabajos sean tardados”.

Al conseguir todas las herramientas se facilitaron los trabajos como mesas, sillas, bancos, ventanas, alacenas, closets, y demás que le solicitaban sus clientes, indicó.

Una de las recomendaciones que brinda y que en todo momento puso en práctica, fue la plantación de árboles, ya que por cada uno que cortaba, plantaba otro, para que las maderas no se acaben y las futuras generaciones cuenten con la materia prima para continuar con la carpintería, es por ello, que dijo que es importante sembrar vida para cuidar el medio ambiente.

Para finalizar, don Celso recalcó que este trabajo no todos lo hacen ya que se requiere de paciencia y cuidado, por lo que dijo que varios de sus colegas fallecieron por la amputación de alguna parte de su cuerpo, la mayoría de los dedos por algún descuido.

Por ello dijo que está contento de dejar este trabajo con los dedos de las manos y los pies completitos, ahora espera que sus hijos tengan el cuidado para continuarlo sin problemas.

El último artículo que realizó fue una carreta que le encargaron en la ciudad capital, el cual le dio un poco de trabajo; sin embargo, lo logró.

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