Irregularidades de 1.5 mds encontró Asecam a alcaldesa de Calkiní
Más de un millón y medio de pesos que ejerció el Ayuntamiento de Calkiní durante el 2022 en obras que no están justificadas ni operan actualmente, detectó la Auditoría Superior del Estado en la revisión de la Cuenta Pública de la administración que encabeza la alcaldesa priísta, Juanita Cortés Moo, correspondiente al ejercicio fiscal del año pasado, y hasta la fecha no ha justificado el destino de ese millonario recurso.
De acuerdo con los informes del organismo auditor que encabeza el veracruzano Javier Hernández Hernández, la Comuna calkiniense ejerció injustificadamente un millón 596 mil 189.28 pesos, provenientes del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal y de las Demarcaciones Territoriales del Distrito Federal.
Un millón 024 mil pesos de ese fondo fueron gastados por el Gobierno Municipal de Cortés Moo sin ninguna justificación, toda vez que no fueron entregados los comprobantes o documentación que respaldara en qué fueron erogados dichos recursos; asimismo, la Auditoría emitió una observación por 572 mil 189.28 pesos, que provienen del mismo fondo, los cuales fueron destinados para la ampliación de la red de energía eléctrica en la Calle 1 por 22 la colonia la Fátima, en la cabecera municipal.
Y es que, a pesar de que los recursos fueron pagados en su totalidad a la empresa que ganó la licitación, la revisión que realizó la Asecam reveló que la red eléctrica está inoperante, es decir, que desde su ejecución no ha sido utilizada, aunado a que el importe devengado no justifica ni la calidad, ni el tamaño del trabajo.
La entidad fiscalizada entregó el pasado 22 de septiembre a la Auditoría el oficio con folio CLK/PRES/1471/2023, formulando aclaraciones y justificaciones, pero fueron insuficientes, por lo que se emplazó a la administración de la edil priísta a presentar, en un plazo de treinta días hábiles, la información y consideraciones para solventar la observación.
Respecto al Fondo de Fortalecimiento para Inversión Pública Productiva, la Comuna calkiniense planeó y ejecutó obras sin previas especificaciones técnicas de construcción Generales y Particulares, es decir, no siguió las normas de construcción aplicables, así como las pruebas de laboratorio para asegurar el cumplimiento de los estándares de calidad y resistencia, lo que pone en riesgo la seguridad de los usuarios.
