A FUEGO LENTO | VISITA PRESIDENCIAL
Por: Enrique Pastor Cruz Carranza
Nunca dejará de ser importante la gira de trabajo de quien porta la Banda Presidencial. Este sábado, tendremos en Escárcega, Campeche, a la Ejecutiva Federal Claudia Sheinbaum Pardo en su primera jornada laboral para poner en marcha programas, proyectos y conformar compromisos de campaña con actos de gobierno. Los ciclos se repiten y, sin ser un acto de enternecedora ingenuidad de quienes habitamos el Estado de Campeche, no deja de ser una magnífica oportunidad para replantear los rezagos y las mentiras de anteriores administraciones federales, las cuales se convirtieron en sufragio convencido y terminaron en decepción colosal y pura demagogia.
Que Escárcega sea el centro de la actividad tiene un significado importante para el proyecto estelar del Tren Maya, en los intentos férreos de reintegrar el sur-sureste en las comunicaciones. La privatización inducida por Ernesto Zedillo generó el colapso del tren del sureste, haciendo desaparecer muchas comunidades donde el humeante símbolo de nuestra revolución terminó en máquinas, vías, ruinas y trofeos grotescos del neoliberalismo.
Muy pocos pueden entender lo que significa la recuperación del Estado con respecto a PEMEX y CFE como empresas del Estado. La privatización incrementó la opacidad, se loteó nuestro territorio y mar patrimonial, mientras la economía de Campeche y, en forma directa, el Municipio del Carmen han sufrido las severas secuelas de una mafia petrolera que se erige desde la década de los 80 y se ha transmutado en las alternancias de simulación democrática del 2000, 2006 y 2012.
Puede ser una magnífica señal en su discurso en el Zócalo el 1 de octubre, donde escuchamos que uno de sus principales objetivos es incluir a nuestro Estado.
Sin embargo, con todo respeto, no es bacheando como vamos a resolver la crisis de carreteras desde Palizada y Candelaria hasta Champotón, y menos el tramo asesino desde Frontera, Tabasco, pasando por la Península de Atasta. Las vialidades están ahorcadas en los dos puentes (Atasta-Carmen y Puerto Real-Isla Aguada), que nunca se han modernizado, y se suma una carretera-paisaje lunar desde Isla Aguada hasta el entronque con Champotón.
Usted es una Presidenta con una magnífica trayectoria profesional a nivel de científica, y por ello no voy a perder el tiempo en sustentar la importancia de los caminos, así como su elemental seguridad para el progreso.
Menos aún seamos insolentes al recordarle que el Estado de Campeche ha sido durante más de medio siglo el productor de la renta petrolera, con faraónicos excedentes que tanto el impresentable Vicente Fox, el etílico Felipe Calderón y el corrupto iletrado Enrique Peña Nieto convirtieron en botín de sus aliados, cómplices y lambiscones.
¡Sí, es cierto, Sra. Presidenta! Las comparaciones son de muy mal gusto, pero en nuestro caso son necesarias, pues la “Administración de la Abundancia” ha sido de corsarios, piratas y forajidos sin fronteras que disfrutan de cabal impunidad, mientras el denominado pueblo apenas logra sobrevivir en medio del desprecio centralista y la complicidad con cacicazgos históricos de horca.
Estamos rodeados de progreso: corredores industriales en Yucatán, infraestructura integral turística en Quintana Roo, industrialización, operación y administración del petróleo en Tabasco; estados con grandes proyectos y apoyo federalista que, a nosotros, nos siguen esquilmando como si todos los ciudadanos estuviéramos haciendo huachicol, traficando contratos de PEMEX o fuéramos los gobernadores-jeques campechanos que exhiben fortunas insultantes sin ninguna actividad productiva que lo sustente, salvo el abuso de poder, inversiones en el extranjero o fomentar desarrollos turísticos en Isla Roatán, mientras en Isla Aguada ni para muelles turísticos se autorizan los dineros robados cada año del PEMEX-PACMA.
No pretendo hacer una carta navideña en octubre, ni tampoco volver a incomodar el poder irritable y omnipotente, como sucedió al recordar en las mañaneras la promesa de traer PEMEX al Carmen y las consecuencias de ser vetado por supuesto mandato de mi compañero de luchas, envenenado por intrigas, el ex presidente Andrés Manuel López Obrador. Ya de los caballeros estamos saturados de incumplimiento de promesas, falta de simple corresponsabilidad con Campeche y verlos salir multimillonarios, con un séquito de apologistas tropicales, blindados con fueros y sin límites de perversidad, presumir tener todo bajo control de sus mezquindades, para disfrutar sin sobresaltos lo que nos han robado a este pueblo trabajador, patriota y que no suplica, sino que reclama justicia a secas.
Es tiempo de cumplir acorde a nuestras potencialidades acotadas, quienes no aceptamos el infausto destino de ser mexicanos de cuarta y luchamos desde nuestras trincheras con elementos de valor para sustentar nuestra inconformidad. Bienvenida a Campeche, Sra. Presidenta Constitucional de México, científica Claudia Sheinbaum Pardo.