CRECE LA CENSURA
Ese grito de “no estás solo, no estás solo” ¿fue acaso una confesión de los consejeros nacionales morenistas para decirle a Adán Augusto que ellos también están inmiscuidos en esas relaciones turbias?
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), ha documentado los ataques a la libertad de expresión que se han registrado en nuestro país de unos meses a la fecha. Uno de los casos más graves es el que afecta a nuestro colega Jorge Luis González Valdez, y al periódico TRIBUNA, pero hay otros más que han motivado la alerta internacional.
Si bien es cierto que hasta hace una semana, la censura “solo” estaba amenazando a los medios de información, a los periodistas y a los ciudadanos, preocupa que este virus maligno ya está infestando toda la vida pública nacional, incluyendo al Congreso de la Unión.
Y es que lo ocurrido anteayer en el Senado de la República no tiene parangón, pues, bajo el argumento de que en la agenda sólo había espacio para abordar la persecución de migrantes, en la Comisión Permanente del Congreso, el morenista Gerardo Fernández Noroña exigió a los legisladores del PRI, PAN y Moci evitar discutir sobre la investigación contra el exsecretario de Seguridad de Adán Augusto López.
De esta manera, el morenista censuró a los legisladores Mayuli Latifa, Diana Gutiérrez, Pablo Vázquez y Margarita Zavala, quienes mencionaron el tema de “La Barredora” y Hernán Bermúdez Requena.
¿De qué autoridad se valió Fernández Noroña para censurar las intervenciones de cuatro legisladores federales’ ¿Cuál fue el criterio utilizado para restringir los temas que deban abordarse en la tribuna?
La única razón válida es el pánico porque este escándalo que ha escalado hasta el ámbito internacional, está socavando los cimientos de la llamada 4T, pues si un exsecretario de Gobernación del sexenio anterior, como lo fue el senador Adán Augusto López Hernández está inmiscuido en esos asuntos, entonces hay suficientes razones para sospechar que vivimos en un narco Estado, sobre todo si sacamos a relucir el respaldo que el consejo nacional morenista le dio al también ex gobernador tabasqueño.
Ese grito de “no estás solo, no estás solo” ¿fue acaso una confesión de los consejeros nacionales morenistas para decirle a Adán Augusto que ellos también están inmiscuidos en esas relaciones turbias?
Y si el secretario de Gobernación del Gobierno anterior está salpicado en sus relaciones con un sector de la mafia, ¿eso quiere decir que también lo está quien fue su jefe? Y si el entonces presidente no supo de los presuntos vínculos de su principal brazo derecho ¿entonces es igual o peor que Felipe Calderón?
Hay mucha tela de dónde cortar en este escándalo y sin duda que también traerá muchas secuelas, pues las redes que empezaron a tejerse en Tabasco, parece que se extendieron a varios de los estados vecinos, entre ellos Campeche. Y si esto es así, entonces ¡aguas! Porque además, de esa manera se explicaría en parte esa obsesión que prevalece aquí por acotar la libertad de expresión y generalizar la censura.