FaceApp, los riesgos de la aplicación que te hace viejito
Tomarse una foto y esperar a que FaceApp te envejezca el rostro podría parecer un acto divertido e inocente, no obstante tiene amplios riesgos,
como el hecho de que con un retrato a detalle de nuestra cara alguien pueda entrar a nuestra cuenta bancaria.
Puede que pienses que no corres riesgo porque tu accedes al cajero o al portal de tu banco con una contraseña conformada de letras, números o signos, sin embargo tenemos malas noticias: la Asociación de Bancos de México (así como todos los bancos del mundo) está en una carrera para la conformación de una base de información biométrica a fin de que cada cliente, sin excepción alguna, entre a su cuenta bancaria a través de voz, huellas digitales o reconocimiento facial.
Ahora, podrías estar pensando que FaceApp, en todo caso, es tan peligrosa como otras aplicaciones, tal es el caso de Facebook e Instagram, por mencionar algunas, a las cuales también les hemos conferido nuestra información biométrica. Pero es un hecho que entre más personas, corporativos o gobiernos tengan nuestros datos el riesgo de que sean más utilizados se incrementa.
Por cierto las políticas de privacidad de FaceApp todavía son más laxas respecto a la preservación de datos personales (incluyendo información biométrica) que Facebook e Instagram, por mencionar algunas.
Wireless Lab, empresa rusa dueña de FaceApp, dice en las letras chiquitas, mismas que casi nadie lee, lo siguiente: «toda la información que proporciones pasa a ser propiedad de la empresa de manera PERPETUA, irrevocable, no exclusiva, gratuita, libre de regalías y con LICENCIA TRANSFERIBLE».
Es decir que Wireles Labb puede vender tu información biométrica a la empresa u organización pública o privada que se le antoje o le convenga a sus fines. Y aquí viene lo que da más miedo: los expertos indican que si, por ejemplo, un hacker descubre tu contraseña y con ella entra a tu cuenta bancaria, al momento que te percates de ellos tienes la opción de cambiar dicho password.
Sin embargo con los datos biométricos no pasa lo mismo, ya que estos son únicos e irrepetibles. Es decir si alguien hace uso de tu cara para entrar a tu cuenta bancaria ¿cómo cambiarías la forma de tu rostro, voz o huellas digitales para que no te vuelva a suplantar?
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) señala que en los últimos 10 años han habido 10 mil reclamaciones por suplantación de identidad, es decir gente que accedió a cuentas bancarias de terceros de quienes obtuvieron datos personales.
Fuente: ElBigData