EL GOBIERNO DE SHEINBAUM EXIGIRÁ CURP PARA COMPRAR CHIPS DE CELULAR
¿MÁS CONTROL O MÁS SEGURIDAD?
ACTIVISTAS TEMEN QUE EL CONTROL DE LAS LÍNEAS TELEFÓNICAS VULNERE DERECHOS DIGITALES.
Ciudad de México.- El anuncio de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la obligación de presentar CURP e identificación oficial para adquirir una tarjeta SIM ha encendido el debate nacional: ¿se trata de una medida de seguridad o de un riesgo para la privacidad?
La propuesta forma parte de una reforma a la Ley de Seguridad y la Ley Federal de Telecomunicaciones, y tiene como objetivo frenar el uso anónimo de líneas telefónicas que, según el gobierno, son utilizadas frecuentemente por grupos delictivos para extorsionar, secuestrar o cometer fraudes.
Sin embargo, organizaciones defensoras de derechos digitales han lanzado una alerta. Advierten que el almacenamiento obligatorio de datos personales durante dos años por parte de las compañías telefónicas representa una amenaza a la privacidad de los usuarios, sobre todo si no existen mecanismos sólidos para evitar abusos o filtraciones.
Frente a estas críticas, Sheinbaum ha insistido en que no se trata de una herramienta de vigilancia. “No tiene nada que ver con ver las conversaciones”, afirmó. Según la presidenta, los datos no incluirán información biométrica ni permitirán acceder a llamadas o mensajes. Además, aseguró que solo podrán utilizarse en investigaciones judiciales, bajo la supervisión de la Fiscalía General de la República.
A pesar de estas garantías, el debate persiste. Colectivos ciudadanos señalan que el simple hecho de vincular una línea telefónica con datos personales ya implica un control que podría prestarse a usos indebidos, sobre todo si las reglas no son claras o si las instituciones encargadas de vigilar el manejo de estos datos no son verdaderamente independientes.
Mientras el Congreso analiza la iniciativa, queda en el aire la pregunta que preocupa a muchos: ¿reforzar la seguridad justifica sacrificar privacidad?