Tres manifestaciones en Palacio de Gobierno
Este martes hubo tres manifestaciones en palacio de gobierno, por un lado, campesinos de Crucero San Luis, Hopelchén, por otro pobladores de Felipe Carrillo Puerto y los habitantes de la comunidad de San Eduardo que se mantienen desde ayer lunes en la explanada de Palacio en su lucha por justicia para que les permitan regresar a sus casas, donde fueron desalojados por orden de la gobernadora Layda Sansores San Román, quien se ha negado rotundamente a escucharlos.
Desesperados porque les han cerrado todas las puertas campesinos de Crucero San Luis, Hopelchén, acudieron al Palacio de Gobierno a pedir ayuda ante la falta de voluntad de la Comisión Federal de Electricidad para reestablecer el servicio a la Sociedad de Productores Hortícolas, lo que podría generar pérdidas por cuatro millones de pesos y dejar sin empleo a más de 300 productores.
Encabezados por Jorge Alberto Canché, presidente de esta sociedad explicaron que La CFE se niega a reconectar el servicio de energía eléctrica a su sistema de riego, solo por un documento que dice Ejido de Crucero San Luis y supuestamente debe decir productores hortícolas. Señalaron que, desde el 2015 han cumplido puntualmente con sus pagos y apenas la semana pasada realizaron el último pago de poco más de 19 mil pesos.
Esto pone en riesgo al menos a 12 hectáreas de cultivo de tomate, que genera más de 300 empleos.
Otro grupo de manifestantes, fue el de habitantes de la Junta Municipal de Felipe Carrillo Puerto, quienes acudieron al Palacio de Gobierno para pedir la destitución de su presidenta Griselda Puc Valverde, una de las principales críticas del gobierno de Layda Sansores San Román,
Los manifestantes, ampliamente identificados con el partido Morena, acusaron a la presidenta de presunto desvío de recursos y uso indebido del presupuesto; y reconocieron que tienen tomado el palacio de la junta municipal desde hace más de dos semanas, aunque descartaron que sigan línea de las autoridades estatales y municipales de Champotón, por el presunto revanchismo político que existe entre los funcionarios morenistas y Puc Valverde.
Al final dijeron que solo quieren que la presidenta de la junta municipal aclare el adeudo con la Comisión Federal de Electricidad que los ha dejado sin agua.
