LACAYISMO MANIFIESTO
Esos desplegados o manifiestos no representan el sentir de los ciudadanos, si no el aplauso de los que ejercen el poder. Entre ellos mismos se cobijan, se defienden y se apapachan…
“Oigan, platicó como en susurro doña Chela a sus amigos de tertulia. Acabo de descubrir una nueva ocupación de nuestra Tía Gobernanta, que además de paseadora, peleonera y bailadora, también dedica su tiempo a firmar desplegados políticos. La mayoría de ellos, a favor de la Emperatriz Claudia. ¿En qué nos ayuda esa fiebre de publicar esos pronunciamientos? En nada, pero ellos creo que se sienten mejor así” aseveró.
–“Tienes razón, concedió el bolero don Memín. Yo me imagino que en las lúgubres oficinas de la Presidencia o de la Secretaría de Gobernación, existe todo un equipo de redactadores de manifiestos, desplegados y pronunciamientos, para cuando la ocasión lo amerite. Los “abajo firmantes” solo se prestan su nombre para darle “peso político” al documento y hasta después se enteran de lo que firmaron; es el lacayismo en su máxima expresión” subrayó.
–“Eso que dices, contestó el poeta Casimiro, me recuerda a un viejo reportero ya en el retiro, y quien incluso creo que ya le rindió cuentas al Supremo, que acostumbraba decir “tú dime el nombre yo invento la calumnia” y a quien incluso aquellos personajes cuyos nombres eran utilizados pare generar una información, le agradecían generosamente el hecho. Tiempos ya idos ciertamente” rememoró.
–“No trates de desviar la atención del tema con tus añoranzas juveniles, le dijo don Julián al vate santanero. Lo que ha dicho doña Chela, aunque parezca vacilada es una triste realidad que está dañando al país. Ya que los “abajo firmantes” utilizan el nombre de la Conago para hacer tales pronunciamientos, con lo que prostituyen el objetivo esencial de esa Conferencia Nacional de Gobernadores, que era ser contrapeso del Poder Presidencial. Ahora son fámulas preocupadas por limpiar la suciedad en donde sea que se encuentre. De verdad que estamos de mal en peor” lamentó.
–Lo cierto, añadió doña Chela es que esos desplegados no manifiestan no representan el sentir de los ciudadanos, si no el aplauso de los que ejercen el poder. Entre ellos mismos se cobijan, se defienden y se apapachan, mientras el pueblo observa estupefacto que el país sigue a la deriva”.
–“Ojalá que no le dé gripa a la señora presidenta, porque entonces van a salir la bola de gobernadores serviles a firmar desplegado para desearle pronta mejoría y para condenar, repudiar y rechazar a esos gérmenes que le provocaron la enfermedad. Así de arrastrados se ven” remató don Memín.

