GASTAR SIN TON NI SON
Es característico de los gobiernos populistas de la izquierda recurrir a la deuda pública para tapar sus huecos. Gastan de más y después no saben cómo equilibrar sus finanzas…
Hemos mostrado en este espacio de manera reiterada, que el Gobierno de la señora Sansores ha tenido dinero suficiente para dar resultados palpables –más de 100 mil millones de pesos en 4 años—sin embargo por ninguna parte se observan obras, servicios, programas sociales o beneficios colectivos.
Tampoco hay posibilidad de investigar por los portales de transparencia, porque la opacidad es una de las políticas públicas más practicadas por este Gobierno.
Una de las creencias populares más recurrentes, sostiene que el “Gobierno” se ha guardado los recursos para usarlo con fines electorales. Más que hacer obras para beneficiar al pueblo, esta Administración sansorista ha optado por derrochar para acciones populista-electoreras, (caravanas, posadas del jaguar, financiar conciertos en la capital y en las cabeceras municipales, etcétera), y así, no hay dinero que alcance.
Está sonando con fuerza la versión de que el Gobierno de la señora Sansores va contratar una deuda pública, esta vez por alrededor de 300 millones de pesos. Nadie sabe con qué intenciones. Solo nos han enterado que el plazo de pago, será de 15 años. Es decir, los dos que le quedan a este fallido Gobierno, y los que correspondan a dos Administraciones siguientes.
Una decisión no solo irresponsable, sino políticamente incorrecta. ¿Por qué endeudar a las futuras generaciones si nadie sabe qué se ha hecho con el dinero que el Congreso le ha aprobado año con año al Gobierno Sansorista?
Con base en la información vertida, la deuda directa de Campeche al último corte (junio de 2024), sumaba dos mil 118 millones. Este año estamos pagando intereses por 354 millones debidamente presupuestados, pero si se aprueba el nuevo empréstito, el débito público estatal ascenderá a dos mil 418 millones.
¿Alguien sabe en qué se gasta tanto dinero?
Es característico de los gobiernos populistas de la izquierda recurrir a la deuda pública para tapar sus huecos. Gastan de más y después no saben cómo equilibrar sus finanzas. Lo más fácil es gastar hoy y pagar después. Y que sean otros los que se queden con esa papa caliente. Es una irresponsabilidad absoluta.
Habla de un Gobierno sin planeación, es decir, improvisado, inepto, fallido. Lo ideal sería reducir esos gastos onerosos a que es tan afecta la señora Sansores. Bajarle un poco al dineral que se eroga para maquillar su fracaso, vía Comunicació Social, dejar de rentar aviones para sus viajes de fin de semana, suspender sus verbenas, pachangas y conciertos, etcétera.
Hay vías para juntar esos 300 millones de pesos que no hipotequen el futuro de los campechanos. Lo que no hay es capacidad administrativa, porque Layda y su séquito no se prepararon para gobernar. Llegaron para saquear y para ejecutar sus venganzas personales. Y en esas andan.

