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NUEVOS QUEMACURAS

Es mayor su necesidad de silenciar a la sociedad pues es la condición para que se mantengan en el poder. Y ya vimos que lo hacen a balazos como le hicieron a Carlos Manzo o con la censura como al licenciado Valdez…

“Con la novedad, disertó el poeta Casimiro, que un legislador federal del partido guinda, llamado Arturo Ávila, pretende expandir la censura a la libertad de expresión para controlar ahora lo que los sacerdotes pueden o no decir desde el púlpito. Con su propuesta de reformar la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, propone sanciones más severas a los ministros religiosos que cuestionen al régimen gubernamental”.

–“¿Entonces no que en nuestro país no existe la censura?” cuestionó indignado el bolero don Memín. “Si pretenden controlar hasta las homilías de los clérigos, no quiero pensar cuál sería la siguiente etapa de esta nueva ofensiva autoritaria. ¿Impedir la libre expresión y manifestación ciudadana? Es innegable que vamos rumbo al fascismo” lamentó.

–“Es curioso, abundó el viejo don Julián, que cien años después de iniciada la llamada “Guerra Cristera” (1926-1929), algunos izquierdistas trasnochados como el diputado Ávila,  pretendan controlar lo que pueden o no decir los sacerdotes, obispos, arzobispos y demás pastores religiosos desde sus templos. Fue precisamente en 1926 cuando se expidió la llamada Ley Calles, que limitó el número de sacerdotes, prohibió el culto público y nacionalizó los bienes eclesiásticos” recordó.

–“Pues así como están las cosas en las finanzas públicas, que nadie se sorprenda si deciden expropiar la Basílica de Guadalupe para imponer tarifas a las personas que desean ingresar a ese santuario que cada año es visitado por millones y millones de paisanos. Les dejaría un buen monto de recaudación, aunque con ello se llegue a la mercantilización de la fe” opinó doña Chela.

–“¡No les des malas ideas!”, protestó enérgico el bolero don Memín, “porque si inician privatizando la Basílica de Guadalupe, después harán lo mismo con otros santuarios religiosos y nos van a querer cobrar hasta para ir a pagar nuestras a la Virgen de Hool o a la de Chuiná, son tan ambiciosos que no se descarta que adopten esas medidas” exclamó.

–“Ciertamente que hay una gran necesidad de incrementar las recaudaciones debido al derroche del Gobierno de la República en sus obras faraónicas o en sus electoreros programas sociales. Pero es mayor su necesidad de silenciar a la sociedad pues es la condición para que se mantengan en el poder. Y ya vimos que lo hacen a balazos contra políticos incómodos como Carlos Manzo o con la censura como el caso del licenciado Valdez, el periodista a quien quieren meter a la cárcel. Y ahora vemos que van contra los curas. Quieren frenar cualquier pensamiento disidente y la forma de hacerlo es controlando lo que se dice y lo que se piensa, algo muy común en los regímenes socialistas y absolutistas” lamentó el poeta Casimiro.

–“Que nadie dude entonces, remató el viejo don Julián, que a medidas drásticas del Gobierno de la República, habrá también respuestas drásticas por parte del pueblo. Somos millones los que nos hemos decepcionado de esta fracasada transformación cuatrotera y esperemos que al menos nos respeten el voto para que los podamos sacar civilizadamente del poder a través de las urnas. Sería el colmo que ahora nos prohíban hasta votar por un partido diferente al de ellos” subrayó.

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