MARCHA DE LA INDIGNIDAD
“Nadie por su libre voluntad acudiría a festejar los siete años de la llegada de un régimen que está destruyendo literalmente al país…”
Que dice la Emperatriz Claudia que no hubo acarreados durante su evento en el Zócalo del pasado fin de semana. Que todos vinieron por su voluntad, que hubo muchos jóvenes y mucha alegría entre los asistentes, señaló con su sorna de siempre, el bolero don Memín.
–“No hay borracho ni loco que coma fuego, contestó con celeridad doña Chela. Tampoco hay político activo, por más cínico y sinvergüenza que sea, que admita que roba, traiciona, miente y acarrea a gente para simular que tiene popularidad. Y con los dichos de doña Presidenta, termino de constatar que ella es de esa clase de políticos: de los que mienten”.
–”Ha demostrado doña Claudia mucha frialdad y temple para enfrentar vendavales, tanto internos como externos, meditó don Julián. Ha sabido conservar la tranquilidad aún en los momentos más álgidos de su Gobierno, los cuales no han sido muy pocos. Y así con esa gelidez, pudo negar que a su evento hayan acudido acarreados. ‘Obviamente quien viene de fuera, pues no viene caminando’, respondió cuando le preguntaron sobre los miles de autobuses que se aparcaron en las calles aledañas al Zócalo, pero no le hicieron reconocer que hubo acarreo”.
–“Bien decía Juan Gabriel, intervino el poeta Casimiro, que lo que se ve no se juzga, y todos vimos el gigantesco y monumental acarreo del sábado pasado. El reparto de dinero, de tortas, de frutsis y hasta el descarado pase de lista para los empleados del Gobierno Federal. Hasta el pudor han perdido y ahora hacen sus cochinadas con todo descaro” matizó.
–“Ha sido la marcha de la indignidad, del borreguismo, de acarreados y chairos, aseguró el bolero don Memín. Y tienen derecho a hacerlo, pero que no quieran después venir a mentirnos diciendo que para aglutinar a tanta gente no tuvieron que acarrearlos. Nadie por su libre voluntad acudiría a festejar los siete años de la llegada de un régimen que está destruyendo literalmente al país” aseveró.
–“Que con su pan se lo coman, remató doña Chela. Si quieren vivir engañados, allá ellos pero que no se quejen cuando el pueblo bueno y sabio se canse de sus mentiras, y les aplique el voto de castigo. Al menos aquí en nuestra tierra cada día aumenta el repudio a todo lo que huela a guinda, y ya veremos si el pueblo ejerce con libertad su voto, o se deja seducir con las migajas de siempre” concluyó.

