LA EJECUCIÓN DE LAS HERMANAS GONZÁLEZ EXHIBE EL FRACASO DE LA SEGURIDAD EN EL ESTADO
- EN MENOS DE 4 HORAS EJECUTARON A OTRA PERSONA EN EL POBLADO DE CHINÁ
La violencia en Ciudad del Carmen superó hace tiempo cualquier narrativa oficial. Lo que ocurrió con Eva González Méndez en agosto y ahora con su hermana Alondra no solo sacude a una familia, sino que desnuda una realidad que las autoridades intentan maquillar. Dos hermanas ejecutadas con apenas cuatro meses de diferencia demuestra que el crimen impone sus reglas mientras la respuesta institucional permanece sin rumbo. Mientras tanto, la secretaria de Seguridad, Marcela Muñoz, participaba en un mitin en el Zócalo de la Ciudad de México, dejando a la ciudadanía frente a una crisis sin conducción clara.
Eva, instructora de zumba y fitness, quedó abatida en plena calle 25. Alondra encontró la muerte dentro del taxi 2343, alcanzada por disparos a quemarropa sobre la calle José Narváez, junto al Polideportivo Chechén. Ambas atacadas por hombres en motocicleta; ambas sin oportunidad de defenderse; ambas víctimas de un patrón que se repite sin control. La investigación oficial se enfocó en bolsas y objetos que, según la Fiscalía, podrían relacionarse con sustancias ilícitas. Sin embargo, esta línea no atenúa la pregunta central: ¿cómo puede repetirse un crimen con el mismo modus operandi sin que exista una respuesta contundente?
El cuerpo de Alondra quedó inmóvil en el asiento del copiloto. Tenía poco tiempo de regresar a la ciudad tras permanecer en Mérida, y aun así la localizaron con precisión. La palabra “emboscada” surgió entre familiares y vecinos, pues la ejecución mostró conocimiento de sus movimientos. La Fiscalía anunció investigaciones, aunque la comunidad carmelita observa cada nuevo expediente con creciente desconfianza.
A este clima de violencia se sumó otro hecho ocurrido el sábado. En menos de cuatro horas, el Estado registró otra ejecución, esta vez en el poblado de Chiná, Campeche. Un hombre sin identificar apareció muerto dentro de un vehículo abandonado en la entrada de la pista de motocross de la colonia Santa Rosa. Recibió impactos de arma de fuego en cabeza y cuello, y la Fiscalía abrió una carpeta por homicidio calificado. El cuerpo fue hallado dentro de un Nissan Versa gris con placas foráneas y trasladado al SEMEFO, mientras el automóvil quedó bajo resguardo de la Vicefiscalía General.
La inseguridad avanza sin freno mientras las declaraciones oficiales se estrellan contra la realidad. Las ejecuciones de las hermanas González y el asesinato en Chiná exhiben un Estado rebasado, donde la violencia dicta el ritmo y las instituciones apenas reaccionan.

