EXPEDIENTE | EL DE LAYDA, GABINETE DE CORRUPTOS
La inclusión de Jorge Luis Lavalle Maury como secretario de Desarrollo Económico, a pesar de sus antecedentes de corrupción y de que se encuentra en un proceso penal por los delitos de asociación delictuosa, lavado de dinero y cohecho, por los cuales pasó año y medio encarcelado en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, termina de apuntalar el trabuco de corruptos que Gobierna el Estado de Campeche.
La lista de funcionarios adictos al dinero fácil y rápido, la encabeza nada más y nada menos que el sobrino incómodo, Gerardo Sánchez Sansores, alias “Seso Loco”, quien hace unos años fue exhibido por empresarios de la Ciudad de México, a quienes les exigió “moches” para que les agilizara los permisos de construcción. En un primer audio, de aproximadamente 35 segundos, señala textualmente:
“Un departamento en México, ¿cuánto cuesta en una zona cerca del Pedregal? ¿Cómo cuánto crees que te pueda llegar a costar un departamento? Vamos a ponerle cuatro millones. Multiplícalo por 200, son 800 millones de pesos. ¿Cuánto quieres darle de mordida? El 10 por ciento son 80 milloncitos. Bueno, pues ¿cómo con cuántos me voy a quedar yo de estos, o con cuánto te vas a caer?”.
En la segunda grabación se le oye decir: “Aquí debe haber unos 5 o 10 millones para que yo te suelte la licencia, y si no, te avientas unos tres o cinco años más en los que tú no construyes, eso en un área donde no se permite construir. Cualquier cabrón que quiera hacer un edificio que necesite un permiso, tú ve y pregunta, óyeme tengo tal predio, quiero sacar una licencia y el permiso te cuesta por punto uno”.
Si bien es cierto que Seso Loco no se encuentra oficialmente en el gabinete de la corrupta y farsante gobernadora Layda Sansores, en los hechos todos saben que con quien toma “acuerdos” para cualquier decisión es con él. También es él quien se queda al frente del gabinete ante las ausencias cotidianas de la titular del Poder Ejecutivo. Él es quien produce el programa “Martes del Jaguar” y quien tiene todas las potestades para amarrar convenios con empresarios, inversionistas, políticos opositores, etcétera. Para no ir muy lejos, hay que recordar que en uno de sus programas, su tía le agradeció que haya obtenido la llegada de la empresa Cruz Azul a Campeche, lo que no es del todo cierto. O más bien, no es cierto.
Además de Seso Loco, otro funcionario con antecedentes probados de corrupción es el secretario de Gobierno, Armando Constantino Toledo Jamit, quien fue grabado y exhibido cuando recogía gruesos fajos de dinero y los acomodaba en un portafolio.
A pesar de que el sinaloense maniobró para que lo exoneraran de ese hecho, nunca podrá negar que recibió esos billetes. A lo anterior hay que agregar las sanciones que le impuso la Auditoría Superior de la Federación por haberse apoderado de maquinaria que debió entregar a productores, sin olvidar claro, su recurrente tráfico de influencias para despojar de sus tierras a humildes campesinos.
Raúl Pozos Lanz, exsecretario de Educación, también fue exhibido recibiendo gruesos fajos de billetes, y si bien ya no se encuentra en el gabinete, hay que precisar que no lo echaron por pillo, sino por sus desencuentros con el Seso Loco. Hay otros funcionarios del gabinete laydista involucrados en casos concretos de corrupción, como el secretario de Desarrollo Agropecuario, Ramón Gabriel Ochoa Peña, quien descaradamente —un ejemplo— le robó casi cuatro millones de pesos a campesinos de San Pablo Pixtún, Champotón, el cual debió usarse para construir un camino cosechero, etcétera.
En este contexto, no debió sorprender la decisión de la anciana mandataria para acomodar en su gabinete al corrupto, sobornado y sobornador Lavalle Maury. Vistas así las cosas, podríamos asegurar que cumple con el perfil que se requiere para estar en el equipo de la corrupta Sansores, pues ella misma, vale la pena recordar, está en un proceso penal por haber desviado más de 150 millones de pesos cuando fue alcaldesa de la Álvaro Obregón de la Ciudad de México. Ha sido protegida por la impunidad del Gobierno de la 4T, pero se dice que esta protección se está diluyendo ante los excesos en que ha incurrido.
No en balde la presidenta Claudia Sheinbaum pintó su raya y se distanció de ella, al reprobar tácitamente la incorporación de un funcionario corrupto como Lavalle Maury al gabinete estatal. “Yo no lo hubiera invitado a mi Gobierno. Es una decisión de Layda”, respondió lacónicamente, y visiblemente contrariada la Presidenta de la República.
Puede creerse que se trata de “una manchita más a la jaguara”, pero hay que anotar que ya son varias las que lleva la anciana gobernadora de Campeche, empezando por la tolerancia a los excesos del sobrino Seso Loco, continuando con el encubrimiento a la ineptitud y la corrupción de Marcela Muñoz, que tanto costo político le ha representado a Morena en la entidad, y culminando este breve recuento con la designación de un funcionario antiobradorista y probadamente corrupto como Lavalle Maury al gabinete de la 4T campechana. O de la caricatura de Gobierno que encabeza Layda Elena.
No hay que perder el hilo de esta interesante historia que protagoniza la perversa gobernadora de Campeche. Hasta sus “amigos” que la apapachan en público, pero la destrozan en privado, coinciden en que ella es la que está cavando su tumba, y protagoniza su funeral. Su lista de pendientes es muy larga, y se asegura que la presidenta Sheinbaum está harta de ella. Ya veremos en qué para esta tragicomedia.