MAQUILLAJES POPULISTAS
Esos eventitos –pistas de hielo, conciertitos y posaditas—solo pretenden taparle el ojo al macho, dispersar unas cuantas migajas para tener entretenido al pópulo, mientras que ellos se llevan la mayor tajada.
Doña Chela llegó eufórica a la reunión vespertina con sus amigos del Parque Principal. Por fin, el Gobierno se animó a traer de nuevo las pistas de hielo, para que los lugareños podamos ir a patinar con las nieves que caen cada año en diciembre. Además, habrá bailes, conciertos, posadas del jaguar, y como colofón, la Tía acaba de anunciar que el costo gratuito en los Ko’ox se mantendrá todo diciembre.
–“Usted me va perdonar mi querida comadrita, le soltó con valor su compadre Memín, pero ya está un poco vetusta para ir a patinar a las pistas de hielo que va contratar otra vez el Gobierno. Y eso de que vaya a mover la cadera y aporrear las zapatillas a los bailes, ya tampoco parece ser propio de su edad”.
–“¡Viejos los cerros y cada año reverdecen!”, respondió airada doña Chela. “Usted porque es un viejo amargado y no disfruta de la vida, pero si el Gobierno está poniendo para nuestra diversión una pista de patinaje, bailes, rifas y posadas, pues son muy tontos los que no lo aprovechen, ya que todo se hace con el dinero del mismo pueblo”.
–“Ya nos va salir usted con la cantaleta –intervino el poeta Casimiro—que estos gobiernos de la transformación sí usan el dinero del pueblo para el beneficio del pueblo, en lugar de que se lo claven como hacían los anteriores. Solo le recuerdo que eso de las pistas de aterrizaje lo empezaron a hacer los gobiernos tricolores, lo mismo que la villa navideña y el concierto de Navidad, y que en esos tiempos traían a artistas internacionales de renombre, no como ahora, que solo traen material de relleno”.
–“El punto en esta discusión, terció el viejo Julián, no es si los Gobiernos de la transformación le regresan al pueblo sus impuestos en pachangas y bailongos, sino qué hacen con lo demás. Esos eventitos –pistas de hielo, conciertitos y posaditas—solo pretenden taparle el ojo al macho, dispersar unas cuantas migajas para tener entretenido al pópulo, mientras que ellos se llevan la mayor tajada. O dígame usted, cuestionó: ¿Qué obras trascendentales ha hecho el Gobierno de la Tía? Lo poco que se ve, es inversión federal, pero no sabemos que ha hecho con más de 100 mil millones de pesos que ha manejado en estos cuatro años”.
–“No tengo argumentos para rebatirle, admitió doña Chela. Los gobiernos anteriores construyeron nuestro imponente malecón, los centros de convenciones de la capital y de la isla, el centro oncológico, el nuevo puente a la isla, el megadrenaje, el distribuidor vial de la Gobernadores y hasta las fuentes monumentales, entre otras grandes obras, mientras que la Tía solo se ha dedicado a pintar de guinda los edificios, los parques, y las obras de sus antecesores. Aun así, no me van a quitar las ganas de ir a patinar e ir a los bailes” se entercó.

