#OPINIÓN: EL DESASTRE QUE VIENE…
Por: Víctor Alberto Améndola Avilés
No, no hablo del 13 de junio.
Fecha que coincide con la licencia del exgobernador Alejandro Moreno Cárdenas, seis años atrás, donde ya podremos comparar, de forma objetiva, sus acciones de gobierno, su herencia en obra pública, sus aciertos y desaciertos, con los de la actual administración estatal.
Es decir, un tú a tú, con datos, obras ej3cutadas en los cuatro años de él y los cuatro años de ella.
Tampoco me refiero al 7 de agosto.
Fecha del 4to “informe de gobierno”, donde sabremos con expedientes públicos, el estado que guarda la administración estatal.
Conoceremos cuántos proyectos con recursos estatales se han concretado, o se ha avanzado en ellos y cuáles son los que serán inaugurados en fechas próximas.
Por la forma en que esta administración se comporta, deben ser decenas de canchas techadas, cientos de kilómetros de carreteras nuevas o de terracería de saca-cosechas; o miles de empleos generados por las muchísimas inversiones que hay en Campeche…
Yo creo que hasta la plena libertad de Lavalle Maury puede ser anunciada… o quizá el anuncio de que Rehn Bernhard tomó un curso exprés de “Open English” al que habría que modificar a un “Open Spanish” o un “Follow Me” versión “Taak in t’aan i’laj ka’a’ab” para estar a tono con la narrativa cuatrotera Campechana.
O incluso, hasta nos podrían anunciar la fantástica noticia de que Alex Marín, habría contratado a Esteban Hinojosa para llevarlo al climax de sus sueños.
No. Ya habrá tiempo para hablar en su momento de esas dos fechas.
Una en 10 días, y la otra en poco más de dos meses.
Me refiero a otro desastre que podría generar tragedias más deshonrosas, de grave impacto social, económico y hasta político electoral.
Campeche ha sufrido el impacto de brutales Huracanes en el pasado.
Gilberto en 1988, Opal y Roxana (dos veces) en 1995, Isidoro en 2002.
Otros más entraron también en los últimos años, sin la misma fuerza y agresión que los primeros mencionados; algunos de ellos fueron: Emily y Wilma (2005); Dean (2007); Ernesto (2012); Earl (2016); Alberto y Helene en 2024.
En 2015 el sexenio de Fernando Ortega Bernés concluyó su administración.
Sus obras emblemáticas en la capital del estado fueron: con dinero público, el Mega Drenaje Pluvial, que ciertamente fue inaugurado un 8 de agosto de 2017 con Alejandro Moreno de gobernador (por cierto, en este evento Peña Nieto se aventó aquella famosa frase de “Tienen un gobernador tan tenaz que podría matar un burro a pellizcos”).
Pero Fernando Eutimio, fue realmente quién impulsó y dio origen a tal obra: más de 20 kilómetros de drenaje subterráneo en toda la ciudad de Campeche.
Y Ortega Bernés también, pero con inversiones privadas, logró que se construyera la actual plaza Galerías, sobre nuestro Malecón.
Detalles.
Ese Drenaje no ha sido “probado” con Huracanes de la talla de Gilberto, Roxana o alguno similar que haya traído o generado altas cantidades de milímetros pluviales.
Los que han llegado a partir de 2015 o 2017 (fechas en que fue concretado y/o inaugurado dicho drenaje) su cantidad de agua le ha permitido “aguantar” la estructura interna de los ductos que absorben el agua y lo “tiran” al mar.
¿Pero… qué creen??
No había la cantidad tal de cemento o de concreto que algún genio de esta administración decidió permitir se vaciara sobre el malecón, sobre el barrio de la ermita, y sobre el trayecto de Santa Lucía que atraviesa la Héroe de Nacozari hasta llegar al aeropuerto.
No soy pitoniso. Dios me libre de estar anunciando una tragedia o algunas desgracias.
Pero ojalá que Chaac, Poseidón, Júpiter o el Universo sean benevolentes con nosotros este y los años por venir.
Les hecho un tip a la 4T :
Uds. que tanto adoran la religión y Santería Yoruba… no está de más que le pongan sus cadenitas verdes a Olokun … y ya encarrerados póngales sus ofrendas azules a Yemaya (con mi amiga diputada la de Azul Fabuloso , no por favor!!!!)…
No vaya siendo que con algún huracán , los sueños de 2027 terminen ahogados, cuando las aguas de la Colonia Jardines o de 4 Caminos arrasen e inunden toda la estupidez hidráulica que Uds construyeron de la forma más absurda e ignorante; tapando absolutamente todo el drenaje natural del paso de agua de esa enorme zona de la ciudad.
Dejando a cientos de familias campechanas a merced de la naturaleza que cada año hace presencia en Campeche.
Y ya ni les quiero asustar si el malecón se llega a inundar: arrasará carriles, estaciones y demás faramalla montada a sobre precios espectaculares.
Y adivinen algo más…
¿Recuerdan una madre llamada FONDEN???
¿Recuerdan quién lo desapareció???
Que Belenos y Tutatis nos proteja.
V. Améndola
Rōnin
