QUE NO SE VA
“No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo soporte. Ya aguantamos cuatro años, qué más da esperar otro año y ocho mesesitos más…”
Doña Chela llegó a la reunión vespertina con sus amigos de tertulia en el Parque Principal con el rostro enjuto, con evidente desánimo, decepción y desencanto. Su voz, apenas audible, producto de su estado mental, apenas alcanzaba a balbucir: “que no se va…la pesadilla no se quiere acabar”.
Don Julián le preguntó si había caído víctima de algún hechizo maligno, o si sus aterradoras pesadillas nocturnas se estaban haciendo realidad, o, si de pura casualidad había perdido el tiempo viendo el bodrio del “Martes del Jaguar”, que por lo común está repleto de discursos de odio, y de espejismos fantasiosos.
–“Eso, eso…”, respondió desganada doña Chela. Y continuó: “anoche en su programa, la Tía ya dijo que no se va ir en enero, como había profetizado uno de tantos arúspices que escriben en las redes sociales, y cuya publicación causó una verdadera euforia popular. Que no se va. No va terminar pronto esta pesadilla” lamentó.
Don Memín, el rechoncho bolero del Parque Principal, le dio unas palmaditas en la espalda, y le susurró: “no hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo soporte. Ya aguantamos cuatro años, qué más da esperar otro año y ocho mesesitos más. Además, ya pasó lo peor porque ya sabemos a qué nos estamos enfrentando, y hasta ya aprendidos a darle la vuelta a sus excesos, abusos y denostaciones”.
–“Es su palabra contra la de la emperatriz Claudia, le dijo el poeta Casimiro en plan de consolación. Si para la señora presidenta, nuestra Tía gobernanta representa un riesgo electoral debido al elevado índice de rechazo popular que tiene, lógicamente que tendrá que tomar la decisión drástica de mandarla como embajadora a Timbuctú, o quizá como “subsecretaria Z” de alguna dependencia pinchurrienta. No te desanimes que no se ha dicho la última palabra” complementó.
–“Siendo totalmente sinceros, añadió por su parte don Julián, al pueblo le da igual si se va o se queda, por la sencilla razón de que su Gobierno ha sido un cero a la izquierda. No ha incidido en el bienestar popular, de manera que si la mantienen hasta el fin de su mandato, seguramente que seguirá incurriendo en tropiezos, yerros y equivocaciones que van a incrementar el repudio del pueblo y que van a propiciar a su vez, un masivo voto de castigo contra su partido. Así que mejor, que se quede” aseveró.
–“La Tía ya está como su aborrecido adversario el tal Vandalito. Pues al Gobierno le convino que se quede como dirigente del tricolor, porque paso a paso ha logrado sepultar a su partido. Igualito está la Tía. Que se quede, para que termine de hundir a los guindas en esta querida tierra nuestra” remató con su ironía de siempre el bolero don Memín.

