EN LAS TRIPAS DEL JAGUAR: 07 DE OCTUBRE DE 2025
INCONGRUENCIAS Y TRAICIONES DE LAYDA.
Si a usted se le olvidó, nosotros se lo recordamos. Durante la pasada campaña electoral, Layda Sansores acusó públicamente que Eliseo Fernández Montúfar canalizaba varios millones de pesos a las campañas de Movimiento Ciudadano a través de las cuentas bancarias de Grupo Ganzo, del cual forma parte la recién estrenada secretaria de Turismo, Adda Solís Peniche.
¿Qué pasó entonces? Preguntamos porque ni siquiera los morenistas de hueso colorado entienden estos cambios de la arbitraria mandataria, que nunca explicó, ni se retractó, ni se disculpó públicamente con Grupo Ganzo, y ahora, de la noche a la mañana, le encarga a Solís Peniche resucitar la Secretaría de Turismo que su nefasto gobierno ha sepultado.
Peor aún, los militantes de Morena se sienten traicionados pues no se explican por qué nombró jefe de su oficina al sobrino del exgobernador priísta Salomón Azar, Rafael Castilla Azar; secretario de Economía al panista Jorge Luis Lavalle Azar; secretario de Desarrollo Rural al priísta Ramón Ochoa Peña o subsecretario de gobierno al priísta Carlos Baqueiro Cáceres. De nada sirve la militancia guinda si la maleta se la llevan otros.
AUTORITARIA EXPROPIACIÓN A RAJATABLA.
Los Rozones, de La Razón de México, titulan un comentario “Arbitrariedad tropical” y critican la arbitrariedad de Layda Sansores, cuya persecución política contra Alejandro Moreno Cárdenas la lleva ahora a expropiarle “a rajatabla” unos terrenos a sus familiares. Sintetizamos.
“A Layda Sansores se le hacía tarde para estrenar la nueva Ley de Expropiación que hace unos días aprobó el Congreso estatal. Amparada en las nuevas disposiciones —promovidas por ella—, expropió tres predios propiedad de familiares o allegados al dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, con una extensión de 70 mil metros cuadrados. En el decreto correspondiente fueron declarados “de utilidad pública”… Podría tratarse de una causa noble, ya que en los terrenos se pretende construir un campus de la Universidad Rosario Castellanos. Sin embargo, la decisión se tomó de manera unilateral, sin consultas previas a los propietarios, como se hace regularmente, es decir, a rajatabla, como todo lo que hace la mandataria campechana.”
La mayor prueba de la arbitrariedad que comete Sansores con esta expropiación se pudo escuchar en su entrevista con Carmen Aristegui, donde aceptó que no tiene pruebas de que Moreno Cárdenas o los propietarios los hayan comprado de manera ilegal. Ánimo, sólo le restan 708 días a este nefasto y rapaz gobierno.