LocalesOpinión

Ya es dictadura

Los amigos que se reúnen todas las tardes en el Parque Principal reflexionan sobre las libertades que se han perdido y sobre el poder del Régimen para espiar nuestras intimidades…

Ni en los 80 años de la “dictadura perfecta” tricolor ni en la docena trágica de los azules, se había visto tanta obsesión del Régimen, por controlar en su totalidad a los ciudadanos. Avanzan imparables en la eliminación de las libertades y de nuestros derechos, y ahora han allanado el camino para introducirse a nuestra intimidad para tenernos totalmente controlados, aseguró taciturno el poeta Casimiro.

–O no te acomodaste en tu hamaca y dormiste chueco, o tu chamaca no  te ha dado arrumacos últimamente, pero destilas un humor negro y un pesimismo que envidiaría hasta el mismísimo filósofo Arturo Schopenhauer, le respondió con su tradicional ironía el bolero don Memín, quien en sus ratos libres era asiduo a todo tipo de lectura y se había declarado enemigo acérrimo de la ignorancia.

–Lamento contradecirte mi buen amigo Memín, le respondió el vate Santanero, pero  déjame aclararte que no me embarga en estos momentos ningún tipo de pesimismo, solo me golpea la absurda realidad que estamos viviendo, en donde el Gobierno está reformando las leyes para tenernos absolutamente controlados.

Mire usted, le ilustró:

Esta semana se aprobaron reformas en las leyes General de Población, de Telecomunicaciones, y en materia de seguridad e inteligencia conectadas entre sí para construir un aparato de monitoreo sobre cada ciudadano. A partir de ya, con solo ingresar tu CURP, el Gobierno podría acceder a tu fotografía, huellas digitales, historial de compras, hospedajes, ubicación en tiempo real y hasta saber con quién te reúnes.

Un artículo de la Ley de Población obliga a todas las empresas públicas y privadas a solicitar la CURP, misma que luego se vinculará con bases de datos de aerolíneas, bancos, hospitales, hoteles y más. La Ley de Inteligencia permite al Gobierno tener acceso sin restricciones a información personal como registros vehiculares, fiscales, inmobiliarios, médicos, de transporte, de armas y teléfonos y el artículo 160 de la Ley de Telecomunicaciones le da a una sola persona, el poder de geolocalizar a cualquier ciudadano sin necesidad de una orden judicial.

–¡O sea que ya estamos maniatados!, exclamó indignada doña Chela. Si además dicen que ya nos pueden espiar desde nuestros teléfonos “inteligentes”, entonces claramente podemos ver que ya estamos en medio de una dictadura.

–Y si a eso le agregas que se ha perdido la independencia del Poder Judicial, que la mayoría de los diputados de todo el país está al servicio del Régimen, que se han modificado las leyes para acotar la libertad de expresión y que ahora ya anunciaron que van por el control del Instituto Electoral, entonces han resultado ciertos los presagios de quienes advertían del peligro que se cernía sobre nuestro país, y ya estamos de hecho ante una dictadura” lamentó pensativamente don Julián.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *