No llueve en la región de la montaña y se mueren las reses
Al menos 20 cabezas de ganado han muerto en la comunidad de Chunchintok, Hopelchén; por la fuerte y prolongada sequía que han provocado que los jagüeyes se sequen prácticamente por completo.
Lucio Kú Ek comisario municipal de esa localidad, dijo que tampoco hay pasto ya en las praderas y potreros; lo que los coloca en una situación grave; pues además no tienen ningún tipo de apoyo del gobierno del estado para hacer frente a estas crisis.
Señaló que las pérdidas económicas por la mortandad de esas 20 reses ascienden a poco más de 300 mil pesos, pues las vacas tienen un costo promedio de 12 mil pesos. Explicó que tienen que pagar fletes de hasta 800 pesos para llevar agua cada dos días a sus potreros y gastan en promedio 2,500 pesos semanales, solo por llevar agua a sus hatos.
Destacó que los ganaderos cheneros, apenas se van recuperando de las tormentas “Amanda” y “Cristóbal” que en el año 2020, causaron la muerte de más de 1500 reses y ya no saben qué hacer.
