La feria de Candelaria se ha convertido en un derroche millonario innecesario, por parte de la actual administración municipal.
Y es que escuche usted, mientras ese municipio padece por falta de servicios públicos, pobreza en sus comunidades y otras necesidades; el alcalde Salvador Farías González destinó más de un millón 580 mil pesos, nada más para esa feria que poco o nada aporta económicamente al municipio.
Por si fuera poco, se ha denunciado un posible maquillaje a los costos; pues según, solo en pirotecnia se destinaron 50 mil pesos; 20 mil pesos para imprimir reconocimientos y 10 mil pesos en flores para la iglesia. Esto sin sumar un “donativo” de otros 50 mil pesos para las actividades de la parroquia. Saque usted sus cuentas.