Lo cierto es que mientras unos pierden feligreses por su insolencia y faltar a la palabra de Dios, otros se ganan el cariño de los fieles.
Y aquí viene a relucir el caso del párroco José Luis Ye Ehuán, quien podría ser cambiado de la parroquia de Dzitbalché, a otra nueva misión, debido a que el obispo no soporta sentirse opacado por nadie.
Lo cierto es que a decir de José Luis Ye Ehuán, él acepta irse a donde lo manden, incluso la Capilla de San José Obrero, donde los fieles piden su presencia.