La madrugada de este domingo, un incendio ocasionado por un corto circuito, acabó con una arrendadora, negocio de la familia Pérez Vázquez.
Después de ocho años de esfuerzo de hijos y nietos de la señora Rosario Pérez Vázquez, las llamas consumieron el patrimonio de su familia, dejando pérdidas de más de cuatro millones de pesos, compartió el hijo de la propietaria, Juan Manuel Poot Pérez.