El problema de invasión de la colonia Mirador podría derivar en un enfrentamiento entre más de 200 familias contra el supuesto propietario, Ricardo Crisanty Gómez, pues amenaza a los vecinos de que si no le pagan alrededor de 30 mil pesos por cada predio, podría quitarle sus viviendas y meter a otras personas.
Desde hace 21 años, las familias se asentaron en este terreno y ya cuando cuentan con los servicios públicos y apoyos para construcción, el propietario se acuerda de cobrarles.
Los vecinos denunciaron que han dialogado con autoridades estatales y municipales y hasta ahora nadie los ha respaldado, inclusive Crisanty Gómez alardea de que las autoridades están de su parte.
Y es que las familias no se niegan a pagar, sino que el cobro sea justo y con la certeza de que recibirán papeles que los avale como propietarios.